RESEÑA ANALÍTICA 14 NATALIA

UNIVERSIDAD DE LOS LLANOS

Reseña Analítica

Profesora: Martha Janneth Ibáñez Pacheco

UNILLANOS	PEDAGOGÍA INFANTIL (LITERATURA INFANTIL)
Fecha	26 de septiembre de 2017
Elaborada por	Gisselle Natalia Reina Guzmán 191103327

REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA: Título: Mamá No Es Una Gallina Autor: Triunfo Arciniegas Ilustrador: María Fernanda Mantilla Editorial: Bogotá-Panamericana, 2002 Número de páginas: 36 páginas.

PALABRAS CLAVE: Mamá, Gallina, Vecina, Lora, Loca.

DESCRIPCIÓN: Relata la discusión entre dos vecinas donde se encuentra presente una niña muy curiosa e inteligente que escucha que la vecina se está refiriendo a su mamá como una señora gallina, ya que anteriormente la mamá de la niña había iniciado la discusión diciéndole lora, estas palabras hacen que la niña compare los aspectos físicos de una gallina y su mamá donde analiza que la mamá no tiene ningún parecido a una gallina, pues no tiene pico ni mucho menos plumas; entonces la niña se mete en la discusión, y le grita a la vecina “Mi Mamá No Es Una Gallina”

ANÁLISIS CRÍTICO: Este cuento nos hace comprender que como adultos no debemos discutir ni expresarnos con un vocabulario diferente que pueda llegar a confundir a los niños y niñas, ya que estos tienen presentes unos conocimientos y unas palabras que si se cambian pueden llevar a una enorme confusión de su realidad. Los adultos tenemos la costumbre de hablar delante de los niños sobre distintos temas sin reflexionar sobre sus efectos. Los niños aprenden de lo que escuchan, sobre todo de sus padres, a construir su identidad, la imagen de los demás, la manera de ver el mundo que les rodea, a tener expectativas, a solucionar conflictos, a desarrollar y controlar emociones, a adquirir valores y creencias, etc. (Cuidado con el lenguaje que usas delante de los niños. Bebés y más. Recuperado de: https://www.bebesymas.com/educacion-infantil/cuidado-con-el-lenguaje-usas-delante-de-los-ninos) Tenemos que ser muy cuidadosos en los temas que hablamos delante de los niños, ya que: A veces los adultos son incoherentes entre lo que hablan y lo que hacen. Lo que hablamos revela una forma de percibir y relacionarse con el mundo que nos rodea. Lo que escucha el niño configura sus creencias y la imagen de sí mismo y de los demás, desarrolla expectativas positivas o negativas, influye en su estado emocional.